Sol y aguaCoup de chaleur, insolation, bain glacé, bain de mer. |
- Golpe de calor.
Puede producirse durante un trabajo muscular demasiado intenso, en un día caluroso y tormentoso, el perro jadea, respira con dificultad, sus fosas nasales se dilatan, las mucosas (ojo, lengua) se cianosan, corre el riesgo de sufrir un coma y un paro cardíaco. Este accidente también puede ocurrirle a un perro abandonado en un coche cerrado en la playa. Aunque el coche estuviera inicialmente a la sombra, recuerda que la Tierra gira y que tu vehículo puede verse expuesto a la luz directa del sol poco después. Asegúrate siempre de que haya circulación de aire en el coche si dejas a tu perro en él. En caso de problema, puedes colocar una bolsa de cubitos de hielo sobre la cabeza de tu perro mientras esperas a que te atienda el veterinario.
- Insolación.
Puede provocar congestión cerebral, con trastornos nerviosos en el animal: excitación, convulsiones, gritos y delirios, e incluso tendencia a morder. Como en el caso del golpe de calor, coloca a tu mascota en un lugar fresco y rocíale agua fría en la cabeza y el cuerpo.
- Un baño de hielo.
En un lago de montaña, por ejemplo. Esto puede provocar artritis y reumatismo, con cojeras dolorosas que tienden a cronificarse, sobre todo en animales mayores. Cuidado también con la bronconeumonía debida al frío.
- Baños de mar.
No es recomendable en aguas demasiado saladas (Mediterráneo) para perros mayores con riñones frágiles. El exceso de sal puede agravar una insuficiencia renal ya latente (vómitos, sed anormal, temblores, etc.).