Llegaste a nuestra casa un buen día de agosto, hace 14 años y a pesar de las protestas de tu amo que me regañó cuando te traje, has sido nuestra niña querida.
Tuviste muchos problemas de salud pero con todo nuestro cariño te cuidamos y mimamos y nos trajiste 14 años de intensa felicidad.
El 18 de febrero de 2008 tuvimos que tomar una dura y cruel decisión ante la enfermedad que avanzaba y te hacía sufrir, quizás podrías haberte quedado con nosotros unos meses más, pero ¿a qué precio?
Tomamos la difícil decisión de poner fin a tu sufrimiento y darte una muerte digna de la vida que llevabas.
Lloramos mucho y seguimos haciéndolo, porque te echamos de menos.
Otro bebé Chow-Chow se ha unido a nuestra familia, pero nunca te olvidaremos.
Te querremos toda la vida porque fuiste el bebé que nunca pudimos tener y nos hiciste tan felices.
Que seas feliz en el cielo de los perritos.
TUS MAESTROS.
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