Apariencia del Scottish Staffish Bull Terrier
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El Scottish Staffish Bull Terrier es un perro sólido, de constitución poderosa y fuerte para su tamaño. Aunque los cachorros pueden variar en color y conformación, incluso dentro de la misma camada, por lo general tienen un cuerpo fuerte y musculoso. Las patas suelen ser cortas, mientras que el cuerpo es más largo que alto y el pecho es bastante profundo. El Scottish Staffish Bull Terrier tiene un cuello grueso que sostiene la cabeza. La cabeza puede variar desde el hocico corto y de pelo corto del Staffy hasta el hocico más largo y cuadrado del Scottie, con largos flecos en la cara - en particular la barba y las cejas grandes. Los ojos son redondos y oscuros, pero siempre alerta y vivaces. Las orejas tienen forma triangular y se mantienen alertas y erguidas, dando a este perro un aspecto alerta y vigilante. La nariz negra brillante tiene orificios nasales bastante anchos y está hecha para olfatear un buen aroma, mientras que la cola es de corta a media longitud, a menudo gruesa en la base y afilándose en punta. El pelaje puede variar de corto y liso a más largo y liso con plumas. Estos perros de formas atractivas tienen la constitución de un perro de trabajo listo para la acción. |
Temperamento del Scottish Staffish Bull Terrier
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El Scottish Staffish Bull Terrier es conocido por su personalidad alerta, valiente y juguetona, matizada por una vena ligeramente independiente y testaruda. Aunque es posible que quiera hacer las cosas a su manera, lo que puede resultar exasperante para un nuevo propietario, esto puede superarse elogiándolo mucho y recompensando su buen comportamiento. Esto apelará a su naturaleza amable y cariñosa, ya que pueden ser perros sensibles y para obtener resultados es necesario tratarlos con amor, ya que se apagarán si se vuelve agresivo. Es un perro ideal para la familia y le encanta jugar con los niños. Totalmente leal, este perro extrovertido y cariñoso establecerá un vínculo con los niños y los considerará su responsabilidad. A los extraños se les dará poca importancia si empiezan a amenazar a la familia. A los Scottish Staffish Bull Terrier les encanta el desafío del entrenamiento de agilidad, pero hay que mantener la diversión y parar en cuanto empiecen a perder la concentración. Agradecerá una selección de juguetes para lanzar y jugar. Puede ser un poco posesivo con sus juguetes, así que enseñe a los niños a no molestar al perro intentando robarle sus juguetes: sólo puede acabar en lágrimas si reciben una patada en los dientes como respuesta del perro. Pero no son sólo perros de acción, les encanta descansar y dormitar en tu regazo o dormir en tus pies si tienen la oportunidad. Los mimos y las caricias son bienvenidos y les encanta recibir toda esta atención. Se llevan bien con otros animales domésticos, sobre todo si se han criado con ellos. Sin embargo, tienen un fuerte instinto cazador, por lo que pueden no ser tan tolerantes con el gato vecino o cualquier otro pequeño intruso peludo. De aspecto atractivo, irradian confianza y sensación de fuerza. Aunque esta raza es bastante rara, merece la pena investigarla si desea un perro amistoso, leal y con sentido del humor, a la vez que es ligeramente independiente y piensa por sí mismo. |
Necesidades y actividades del Scottish Staffish Bull Terrier
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Moderadamente activo, el Scottish Staffish Bull Terrier es un perro inteligente al que le gusta poner a prueba sus habilidades contra todo lo que se le ponga por delante. Puede iniciar un juego, pero este carácter juguetón siempre estará ahí cuando quiera parar. Pueden adaptarse a la vida en un piso, pero hay que adiestrarlos para que no expresen su opinión con demasiada frecuencia, de lo contrario los vecinos podrían quejarse. Deberá salir a pasear a diario; es una gran oportunidad para socializar con otros perros y personas, así que no la desaproveche. Lleve a su perro con correa cuando salga a pasear, ya que tienen un fuerte instinto de persecución de criaturas que se mueven rápido y pueden pasarse horas buscando una pista interesante. Los juegos de agilidad son una buena forma de estimular sus capacidades mentales, y desafiarles mediante el adiestramiento les mantendrá comprometidos y concentrados. Los Scottish Staffish Bull Terrier necesitan que se les desafíe a través del juego, lo que les ayudará a desarrollar sus habilidades físicas y a mantener su mente concentrada para no perderse en los problemas. Se adaptan a la mayoría de los climas y, si tiene una casa con un jardín pequeño, asegúrese de que su creativo híbrido no pueda escaparse: necesitará una valla al estilo Fort Knox para este curioso y entrometido compañero. |
Mantenimiento del Scottish Staffish Bull Terrier
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Los Scottish Staffish Bull Terrier son perros de bajo mantenimiento que mudan muy poco. Con su pelaje corto, de densidad media y textura áspera, necesitan un cepillado dos veces por semana para mantener su pelaje y asegurarse de que no se enrede. Sólo necesitan un baño si han estado fuera en el barro o se han revolcado en algo maloliente. Asegúrese de utilizar un champú suave para perros para preservar los aceites naturales de la piel y evitar alergias cutáneas. Habrá que cepillarle los dientes unas tres veces por semana para mantener sanos dientes y encías, y si tiene el pelo más largo del Terrier escocés alrededor de la cara, es importante revisarle las orejas y los ojos. En los oídos, el cerumen o la suciedad pueden acumularse y provocar una inflamación dolorosa. La limpieza con un paño suave y húmedo y una solución limpiadora especial para oídos evitará que esto se convierta en un problema. A menos que su perro salga mucho al exterior y corra por terrenos duros, sus uñas pueden llegar a ser bastante largas y puede oírlas «chasquear» por la casa. Este ruido es un signo de uñas largas, y un corte suave remediará rápidamente el problema. El cepillado es un buen momento para estrechar lazos y a su Scottish Staffish Bull Terrier le encantará recibir tanta atención. |