La historia de una adorable y valiente perrita Shih-Tzu que fue explotada por los humanos hasta que se convirtió en esta sollozante bolita de pelo en mis brazos.
Fatalmente enferma de cáncer en los ganglios linfáticos.
Vendida y revendida por estos traficantes de esclavos de 4 patas, Hoho encontró la felicidad, por desgracia efímera, en una vieja casita calentada por el calor del Amor.
Le prometí que nunca la dejaría marchar, que la amaría y la querría hasta que la muerte nos separase...
Aquí está, la cruel, con su rastro de dolor y su horrible fuerza que separa a las personas que se aman.
Hoho, te tengo en mis brazos, ya no sabes donde ponerte, el sufrimiento te retuerce tanto...
Te quiero mi amor, has vuelto a casa, te prometí que nunca más dejarías este hogar donde te quieren: estás aquí mi cielo, mi amor, mi amor, intento no llorar mi dolor, por ti, para que puedas decirte "¡Mamá está contenta de verme otra vez! ¡He vuelto a casa! "
Cariño mío, el médico vendrá a dormirte esta tarde temprano, y estarás fuera del alcance de este sufrimiento que te hace gemir, por fin en reposo, lejos del mundo cruel e infame de los humanos...
Te irás, abrazado a mis brazos, yo que prometí no abandonarte nunca, tumbado en el cochecito desde el que te encantaba observar todo lo que ocurría a tu alrededor...
Mi fabuloso Hoho, mi valiente, tierno y dulce Hoho...
Ocho meses de amor contra 5 años de miseria, la vida no es justa...
El tiempo ha volado: la decimotercera hora ha sonado y Hoho retoza feliz en las praderas del cielo en compañía de todos mis otros amores, Rouschka, I'Marouschka, Folize's, Calvin, Slavia, Eléa, Thorgal, Vania, Kiki...
El cruce del río Estigia fue suave, el líquido salvador indoloro, sus grandes ojos en los míos para un último mensaje de ternura y comprensión...
Ha pasado un año, exactamente un año desde el 12 de marzo...
Mi dolor y tu ausencia son tan fuertes como siempre.
No puedo dejar de vigilarte, de buscarte, de intentar oler el dulce aroma de tu infancia...
He retomado este texto que escribí cuando desapareciste, cariño mío, y no quiero que caigas en el olvido...
Una zorrita más o menos...
No, no has sido olvidada mi cielo, mi amor, mi niña...
Te quiero Hoho
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