En homenaje a Mi OxmoGracias a Guintini |
A mi gran osito de peluche Oxmo que murió en agosto de 2005, mi gran bebé que nunca abandonará mi corazón. Loulou, te recuperé en el año 2000 después de luchar durante mucho tiempo para volver a comprarte a un hombre sin escrúpulos. Tenías 2 años, estabas destinado a ser un perro de pelea, te mataban de hambre, te pegaban, te encerraban en la oscuridad. Un día me encontré contigo y la expresión de tu cara me dijo mucho. Desde ese día hice todo lo que pude para recuperarte, y tras meses de lucha por fin pude convencer a tu dueño, que necesitaba dinero, para que me dejara comprarte. Eras tan tímido y flaco, pero tu mirada me conquistó. Según tu amo no eras apto para ser un perro de pelea, me costó meses sacarte de esos miedos pero 1 año después estabas majestuoso y ya no matabas gatos, que era lo que te habían ordenado hacer. Estuvimos 5 años y medio juntos pero todos los golpes que recibiste te dañaron mucho. Para fortalecer tus músculos, te atábamos al parachoques del coche con un lazo y te hacíamos correr a 60 km/h. Día tras día tus ojos cambiaban, se llenaban de amor. El camino contigo no fue fácil porque odiabas mucho a los hombres, pero tuvimos un viaje impecable hasta el día en que contrajiste un cáncer de médula ósea. A pesar de una operación, nunca volviste a caminar, así que tuve que poner fin a tu vida, que estaba condenada al fracaso. Habías perdido las ganas de vivir y tus ojos me imploraban que pusiera fin a todo, cosa que hice, pero que aún me destroza. De un don nadie pasaste a ser el rey. Mi bebé, aunque me hice cargo de una hembra Rott como homenaje a tu raza, a pesar de todas las limitaciones impuestas por las leyes para los Rotts. Quiero que sepas que nunca te olvidaré, sigues vivo dentro de mí, te pido que me esperes al otro lado, mi niño grande. Te quiero mucho. Adiós Oxmo. |