En homenaje a A mi pequeña MilaydieGracias a Aurore |
Han pasado 15 años y 5 meses desde que llegaste a mi vida, y ha sido el mejor regalo de cumpleaños que he tenido. Nunca olvidaré mi duodécimo cumpleaños. Mi pequeña Milaydie, tan traviesa y tan adorable, dulce e inteligente. Me diste tanto amor y me cuidaste cada día como una pequeña mamá. Pensé que te tendría conmigo toda la vida, y aunque ya no vivía en casa, cada vez que venía me organizabas una fiesta increíble. Por eso, cuando supe que padecías cáncer, sentí que me asfixiaba. Fuiste tan valiente, mi pequeña Milaydie, realmente fuiste un ejemplo para mí y para mis padres. Este año de lucha contra la enfermedad fue la prueba más hermosa de amor que nos diste. A pesar de todo el esfuerzo que tuviste que soportar y de tu pequeño cuerpo deformado y devorado por esta desagradable enfermedad. Cuando el veterinario me telefoneó para decirme que estabas sufriendo demasiado y que había llegado el momento de dejarte marchar, que era el mejor regalo que podíamos hacerte, mis padres y yo, el tiempo se detuvo para mí. Desde entonces tengo la sensación de que nada volverá a ser lo mismo, que nunca más volveré a ver tu carita y nunca más podré abrazarte. Te echo de menos, mi pequeña Milaydie, y mis padres también. Sin ti, todo está vacío. Este 12 de noviembre de 2007 quedará en mi memoria para siempre, me hubiera encantado estar contigo en un momento tan duro, ¡lo siento mi Milaydie! |