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Breve resumen historico
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El Maine coon es probablemente una de las razas naturales más antiguas de Norteamérica. Varias leyendas describen los orígenes de la raza. La más extendida es que el Maine coon es el resultado de un cruce entre gatos y mapaches (coloquialmente coon, diminutivo de mapache), lo que explicaría su color (el más común es el marrón atigrado) y su cola muy tupida. Por supuesto, es genéticamente imposible producir un híbrido así, pero la raza ha conservado su nombre de esta leyenda. La segunda es que el Maine coon es descendiente de los seis gatos de Angora enviados por María Antonieta de Austria cuando se disponía a huir de la Revolución Francesa. Estas Angoras fueron traídas en el barco Sally del capitán Samuel Clough desde Wiscasset con otros efectos personales de la Reina. Los Angoras se mezclaron con gatos de granja locales para dar lugar al Maine coon. Otra teoría es que la raza se desarrolló a partir de cruces entre gatos de granja locales y otros gatos de pelo largo o medio importados por primera vez por los vikingos alrededor del año 1000. Se cree que el Maine coon desciende del gato del bosque noruego, lo que explicaría su parecido. Esta hipótesis se ve corroborada por el parecido entre el Van Turk, el Siberian, el Norwegian y, por último, el Maine coon, cuyos orígenes geográficos se corresponden con los desplazamientos de los vikingos. Este parecido con el noruego también puede explicarse por el hecho de que el clima invernal de Nueva Inglaterra y Noruega son idénticos y, por lo tanto, habría conducido a la selección de las mismas características físicas. En el siglo XIX, la Sra. Pierce, una de las primeras propietarias de Maine coon, también planteó la hipótesis de que estos gatos habían llegado a la costa de Maine por mar, no gracias a los vikingos, sino más bien por las familias adineradas de Maine, que en aquella época poseían barcos lujosos y viajaban mucho. Habrían traído muchos animales exóticos de sus expediciones, sobre todo para diversión de sus hijos. La segunda hipótesis de la Sra. Pierce era que los gatos de angora se embarcaban en barcos mercantes para cazar ratas. En cualquiera de los dos casos, habrían desembarcado en la costa este y se habrían mezclado con los gatos locales de pelo corto. Otra posibilidad es que fueran importados por inmigrantes europeos y se adaptaran a las duras condiciones climáticas y de vida de la región. |
Aspecto general
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El cuerpo del Maine coon es largo y rectangular, con un pecho ancho y músculos poderosos. Sin embargo, la silueta general debe permanecer equilibrada y libre de exageraciones. El Maine Coon es una de las razas felinas más grandes del mundo. En 2006, el récord del gato más largo del mundo (121,9 cm) lo ostentaba un Maine coon llamado Leo. Este récord fue batido por otro Maine coon llamado Stewie. El gato medio pesa entre 6 y 9 kg. Los machos son más imponentes (de 6 a 9 kg) que las hembras (de 4 a 6 kg), alrededor del doble del peso de los gatos callejeros. Para alcanzar semejante peso, su crecimiento es lento y tarda varios años (entre tres y cinco años). |
Temperamento / comportamiento
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Los rasgos de carácter no se describen en los estándares; son totalmente individuales y dependen de la historia de cada gato. Según el retrato del libro oficial de orígenes felinos, el Maine coon se lleva bien con todo el mundo, incluso con extraños y otros animales, y puede ser amable con los niños según el retrato del LOOF. Son apegados a su familia y a otros animales, incluidos los perros. |
Sanidad
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Como cualquier gato de una raza muy endogámica, el Maine coon puede verse afectado por varias enfermedades, la principal de las cuales es la cardiomiopatía hipertrófica (MCH). En el Maine coon, esta enfermedad se transmite en la mayoría de los casos de forma autosómica dominante, a través de una mutación en el gen MYBPC en la forma HMC1, que es específica de la raza y ha sido objeto de una prueba de ADN específica. La movilización de los criadores de Maine coon contra esta enfermedad y su colaboración con los laboratorios de cardiología han permitido poner en marcha esta prueba de ADN, con el objetivo a corto plazo de erradicar esta forma de cardiomiopatía, que es específica del Maine coon y representa el 70% de los casos conocidos en la raza. Sin embargo, hay que subrayar que esta prueba de ADN no basta para confirmar que un Maine coon está libre de cardiomiopatía, y sólo es una herramienta para el criador: el seguimiento ecográfico con Doppler color y DTI sigue siendo absolutamente esencial en el seguimiento de los reproductores. La displasia de cadera también puede afectar a los Maine coon. Esta enfermedad hereditaria se caracteriza por una malformación de las articulaciones de la cadera. La displasia provoca daños dolorosos en la articulación, que pueden desembocar en una artrosis. No hay muchos estudios sobre este tema, pero parece que la raza está especialmente afectada, hasta un 20% según la American Orthopedic Foundation for Animals. No existe tratamiento para esta enfermedad, aparte de la cirugía para extirpar la parte malformada del fémur. Pueden administrarse medicamentos para ralentizar el daño al cartílago o aliviar temporalmente la inflamación. La raza también puede sufrir atrofia muscular espinal (AME). Esta enfermedad, que sigue siendo extremadamente rara en el Maine coon, provoca la degeneración de las neuronas que controlan los músculos. Se transmite genéticamente de forma autosómica recesiva. También en este caso existe una prueba de ADN para detectar mutaciones en el gen LIX1, responsable de la enfermedad. |
Genética
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Las investigaciones genéticas llevadas a cabo por la Universidad de California en Davis han señalado la presencia en el Maine coon de una frecuencia muy baja del alelo recesivo responsable del pelaje blanco del Sagrado de Birmania. Existe una prueba genética específica para detectar el gen del gantage birmano. |
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